martes, octubre 17, 2006


La movilización estudiantil derribó mitos y se instaló con un sólido discurso social y político.

Se encaminaron desde las demandas económicas hasta los temas de fondo de la educación y el modelo, la derogación de la Ley Orgánica Constitucional de la Educación (LOCE) y la municipalización, es decir, la exigencia de una educación que vuelva a manos del Estado.

Una característica del movimiento fue su independencia. La Asamblea Nacional de Estudiantes Secundarios (ANES) es una democracia directa, con delegados y voceros revocables. Y sigue su curso. No está dormida como piensan algunos.

Estos meses de discusión en las bases han dado frutos y, poco a poco, vuelven a soplar los vientos de movilización y exigencia de una educación que garantice mayor equidad y calidad. Ya no les convencen las “soluciones mediocres” planteadas por el gobierno. Después de meses de participar en Consejo Asesor Presidencial, no confían en él.

Se han convencido que está compuesto, en su mayoría, por quienes defienden y promueven la educación de mercado, incluyendo empresarios sostenedores de liceos. Ya hicieron escuchar su voz y todo indica que pronto se bajarán de la mesa para seguir trabajando con los actores sociales y gremios en la llamada “mesa paralela de Educación”.

En estos meses han realizado asambleas y talleres en la mayoría de los colegios y liceos, y es un sentir generalizado el que el Consejo gubernamental no resolverá nada ni menos derogará la LOCE.

Y es que persisten las condiciones de extrema desigualdad en los liceos y colegios municipalizados y particulares subvencionados.

- El 91 por ciento de los estudiantes apenas recibe 30.000 pesos mensuales para su educación, que es lo que invierte el Estado. Mientras, la educación privada invierte, en promedio, 200.000 pesos por alumno.

- Los estudiantes siguen planteando con fuerza cambiar profundamente el sistema educacional. Junto con la derogación de la LOCE, plantean se modifique la Jornada Escolar Completa (JEC) y se mejore la deteriorada infraestructura de escuelas y liceos.

- Son un millón 700 mil alumnos los que dependen de la educación municipalizada, mientras otro millón 500 mil, de la educación particular subvencionada. La mercantilización ha provocado un continuo deterioro de la educación y el incremento de las diferencias sociales, lo que se refleja cada año en los resultados de las pruebas Simce y PSU. Sólo acceden a la educación de calidad quienes pueden pagarla.

Los estudiantes secundarios entregaron un documento al gobierno anterior con todos estos temas y sus propuestas, pero jamás recibieron una respuesta. Por eso, ya nadie les puede engañar. Saben que la LOCE fue promulgada el 10 de marzo de 1990 -un día antes que el dictador Pinochet dejara el gobierno-, y que nuestro país es el único en que el Estado entrega fondos públicos sin ningún control a empresarios -llamados sostenedores-, que sólo persiguen el lucro y las fáciles ganancias.

Además, las estadísticas del propio gobierno demuestran que la municipalización ha profundizado la desigualdad en educación.

- El principio central de la LOCE es la “libertad de enseñanza”, pero entendida como la reducción del rol del Estado y el “dejar hacer” liberal. No existen normas de control sobre la utilización de los recursos públicos que son entregados a manos de sostenedores.

- Chile es el único país del mundo que permite el lucro con fondos públicos sin control ni rendición de cuentas. Durante los gobiernos de la Concertación se han dictado diez leyes modificatorias de la LOCE, pero ninguna introdujo cambios de fondo a esto.

- El gasto público en educación sigue siendo bajo: 4,1 por ciento del PIB. Durante el gobierno de Allende alcanzó a un 7 por ciento.

- Llegamos a la conclusión que el Consejo Asesor no va a cambiar nada. Fue sólo una estrategia muy bien pensada por el gobierno para recluirnos y parar las movilizaciones. Para que nos fuéramos a nuestras casas tranquilos a esperar una respuesta que nunca iba a llegar. Nuestros propios representantes hoy dicen que la mesa sólo ha servido para sentarse a comer galletas y tomar Coca Cola”.